
Luis Junco: “Gijón no necesita un reglamento de laicidad marcado únicamente por la imposición de una ideología sectaria que recorta libertades y que daña la imagen y representación institucional de todos los gijoneses”
“El reglamento de laicidad que pretende aprobar Ana González, no responde en ningún caso a la necesidad de avanzar en el texto constitucional que declara al Estado Español aconfesional. Lo que pretende alcanzar es un Estado y un municipio ateo, que es en sí mismo supone otra forma de creencia ideológica únicamente afín a PSOE, IU y Podemos”.
“El ayuntamiento debe ser neutral frente a todas las manifestaciones culturales, artísticas o religiosas. Pero eso no quiere decir que haya que prohibir su asistencia a las mismas, representando a TODOS los gijoneses. Si aplicamos este mismo argumento al fútbol, el ayuntamiento no debería asistir al palco de autoridades del Molinón, ya que oficialmente no tiene equipo.”
“Es de risa que hablen de un reglamento de laicidad de mínimos, borrando de un plumazo nuestra cultura, nuestra historia o nuestras tradiciones, si fuese un documento de máximos estaríamos hablando del soterramiento de las iglesias de Gijón.”
“Queremos una ciudad para los gijoneses y no para colgar panfletos ideológicos, una ciudad donde prime la convivencia, la participación y el respeto, sin prohibiciones, ni discriminaciones ni dogmatismos, con libertad plena.”
Gijón, 8 de marzo de 2023
El Presidente de SUMA PRINCIPADO en Gijón y Candidato a la Alcaldía en las próximas elecciones municipales de mayo, Luis Junco Navascués, trasladó a los medios de comunicación que “Gijón no necesita un reglamento de laicidad marcado únicamente por la imposición de una ideología sectaria que recorta libertades y que daña la imagen y representación institucional de todos los gijoneses al cercenar la libertad de representación del ayuntamiento en celebraciones tradicionales de carácter religioso o funerales, lo que supone una muestra más de que el mandato municipal de Ana González que ahora termina ha venido marcado por la imposición continua de una ideología que ha supuesto el recorte sistemático de libertades para los gijoneses. Ahora con una nueva prohibición a través del reglamento de laicidad”.
Y continuó, “el reglamento de laicidad que pretende aprobar Ana González, no responde en ningún caso a la necesidad de avanzar en el texto constitucional que declara al Estado Español aconfesional. Lo que pretende alcanzar es un Estado y un municipio ateo, que es en sí mismo supone otra forma de creencia ideológica únicamente afín a PSOE, IU y Podemos”.
“El ayuntamiento debe ser neutral frente a todas las manifestaciones culturales, artísticas o religiosas. Pero eso no quiere decir que haya que prohibir su asistencia a las mismas, representando a TODOS los gijoneses. Si aplicamos este mismo argumento al fútbol, el ayuntamiento no debería asistir al palco de autoridades del Molinón, ya que oficialmente no tiene equipo. Ser neutral o aconfesional quiere decir que respeta la libertad y que no se impone o se ostenta una determinada creencia, no que se prohíbe las manifestaciones religiosas o su representación en las mismas”.
“Es de risa que hablen de un reglamento de laicidad de mínimos, --ha indicado el presidente de Suma Principado Gijón--, ya que, dicen, se debe respetar el texto constitucional. Efectivamente la supresión de todos los símbolos religiosos que jalonan nuestro municipio, tal como pretenden en el futuro, sería equivalente a borrar de un plumazo nuestra cultura, nuestra historia o nuestras tradiciones. Si fuese un documento de máximos estaríamos hablando del soterramiento de las iglesias de Gijón o el reconvertir fiestas como la Navidad en akelarres”.
“Desde SUMA PRINCIPADO queremos una ciudad para los gijoneses y no para colgar panfletos ideológicos, con un “gobierno de los ciudadanos para los ciudadanos” y que no dé la espalda a los mismos, que no pierda de vista la humanidad, las tradiciones o las creencias de las personas. Una ciudad donde prime la convivencia, la participación y el respeto, sin prohibiciones, ni discriminaciones ni dogmatismos, con libertad plena”, concluyó Luis Junco.